Y pues es quien hace iguales
al duque y al ganadero,
‘con dinero baila el perro’.

Francisco de Quevedo y Aristocrisis

Siempre que se tenga la posibilidad de observar un espectáculo dirigido, producido o interpretado por Andrés Carreño a la sombra de Cabaret Misterio o Dr. Misterio, se puede tener la seguridad de que algo extraordinario ocurrirá en el escenario. Si su trayectoria profesional y logros obtenidos en los pasados meses con Lobo y oveja y Qué con Quike Quinto son muestra de su estilo, calidad, delicadeza y dedicación teatral, Aristocrisis, espectáculo de cabaret en el que comparte el escenario con Minerva Valenzuela dentro de las salas del Foro Shakespeare, se suma a la lista de estos trabajos bien logrados para su proyecto profesional.

Este show diseñado para adultos propone una dinámica de participación a la que el público no se puede negar. En estos días en los que la opinión pública se ha involucrado en ser juez y parte de los vicios que abundan en la sociedad, Carreño y Valenzuela abren una ventana bien cachonda con vista a la posibilidad de normalizar el hecho de hablar de todo cuanto esos asuntos contienen de contingentes. Planteando la posibilidad de usar la comedia como vehículo de rescate para reflexiones serias, ambos comediantes realizan una serie de cuadros en los que sectores sociales, considerados marginales, una vez colocados en el centro de atención de los espectadores, son ametrallados con un humor que comienza por hacer notar la condición flemática del espectador y la urgencia de tomar en serio aquello que únicamente se considera incómodo para la clase ‘poderosa’ de nuestra sociedad. Al mismo tiempo, dialogan con la creación teatral de nuestros días que se genera en otros puntos del país dentro de la que conviene recordar los proyectos de Teatro Sin Paredes, Teatro Penitenciario y Los Colochos de los que ya hemos conversado anteriormente en otras reseñas.

Se debe agradecer la experiencia profesional de esta pareja a la que se le nota a cada instante en la escena la sonrisa, el pensamiento, complicidad y gusto por su trabajo. Aquello que el silencio del intérprete oculta detrás de la caracterización de sus personajes y que hace pensar que este show es en serio, pero que no hay que creer nada de lo que acontece en él, pues todo en ellos despierta una carcajada abierta y socarrona. Así, después de la primera media hora de show la carga grave y la condición abúlica aligeradas, ambos comediantes van elevando el tono hasta llegar a abrir heridas relacionadas con asuntos culturales, sociales y políticos que podrían herir la sensibilidad del asistente ‘más sofisticado’, o bien, se comparte y arma el espectáculo al tiempo que los asistentes comienzan a querer participar todo el tiempo.

En este sentido, a Carreño y a Valenzuela debe seguírsele la pista. Ambos, uno comediante de corazón, y la segunda espléndida actriz de burlesque, trabajan con todo cuanto hallan frente a ellos y con distintos tipos de público. Así que, se puede esperar con agrado desde la gracia más inocente, hasta el cuchillo más afilado; desde la voz más dulce y ambiente erótico hasta la realidad más sórdida y lacerante; desde un dulce compartido, hasta un certificado de participación en el engaño que el espectador decide comprar. Finalmente, “con dinero baila el perro” y vale mucho el gusto y la risa de un lunes por la noche que decida ver este show para regodearse, y decidir si ser el que tiende la mano con el poderoso caballero o el perro que baila con el hueso.

Lunes 8pm

Foro Shakespeare

Edad: mayores de 18 años

Duración aprox. 1 hr. 30 min.

Costo: $250

Foto de portada: AvE

2 comentarios

  1. Muy buena propuesta para pasar un buen rato con los amigos, sobretodo ahora que al parecer, está disminuyendo este asunto del Covid. ¿Hasta cuándo estarán dando funciones?

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