Rafsil, música para "adictos al cemento"

Sin presentaciones a la vista, pero preparando el lanzamiento de su nuevo material, los integrantes de Rafsil nos comparten sus planes para este incierto 2021. Y es que el adjetivo no está de más. De las pequeñas tocadas y festivales en lugares como Pan y Circo no quedan más que anécdotas. Tan solo en la Ciudad de México, donde hasta el pasado 14 de marzo del presente año se confirmaron 37,521 defunciones por Covid-19*, la probabilidad de reabrir este tipo de espacios sin riesgos para la población todavía es muy baja.

Sin embargo, para los integrantes de la banda la falta de eventos les ayudó a concentrarse en la producción y diseño de su nuevo sencillo, Cara o Cruz, el cual, esperan, saldrá a finales de este mes de mayo. De lo malo de un 2020 que parece no terminar, trataron de sacar lo mejor. Diez canciones que, en palabras de sus creadores son el resultado de su preparación como músicos y experiencias personales. Una síntesis de su “día a día” en la que caben sus ansias de superación, el “folclor mexicano” y “experiencias comunes” con las que cualquiera puede sentirse identificado.

De la calle para la calle

Canciones como “Calle”, por ejemplo, remiten a conocidas imágenes citadinas. La cerveza tibia, los tenis colgados en un cable o el agitado transcurso del día a través del metro nos hacen sentir a la crudeza de la ciudad como una carga compartida entre los “adictos al cemento” que la habitan. Un espacio de desigualdad que, sin embargo, también puede sentirse propio.

Para Fernando (bajista), quien se unió a la banda después de escucharlos tocar en vivo, “Lo que vemos en la calle o el metro. Todo lo que puedes ver, te empieza a nutrir y es inevitable reflejarlo. Obviamente, tú le pones tu dosis personal. Tu manera personal de decirlo, y al final del día yo considero que la ciudad y todas las personas que habitan en ella nutren la música de Rafsil y la manera en que Rafsil se expresa”.

En este tenor, la banda ha adoptado un estilo fiel a grupos como Beastie Boys, Red Hot Chili Peppers o Rage Against The Machine, combinando géneros musicales como funk, metal, rap o grunge. Siguiendo la premisa de que “uno habla de lo que ve y lo que vive”, el grupo se ha dado a la tarea de crear nuevas canciones inspiradas en sus propias vivencias cotidianas.

Ahí viene Rafsil

Aunque no muy común, Rafsil es un nombre propio. La idea de la denominación para el grupo, cuentan sus integrantes, nació de una lluvia de ideas de la que su primer vocalista pareció haberle dado al clavo. “No es como: “Ah, no mames. ¡Ahí viene Rafsil!”, pero el apelativo convenció a los fundadores. Creada en 2017 por Carlos Portillo (guitarrista), Omar Lavin (guitarrista) y Nora Guerrero (baterista), la banda que empezó como un grupo de amigos al poco tiempo empezó a cosechar colaboraciones con grupos como Larva, Salario Mínimo, Jessy Bulbo o Triciclo Circus Band.

Siguiendo el “sueño del músico”, Fernando en el bajo y Manuel o “Many” como vocalista, se unirían más tarde terminando por conformar un grupo de cinco integrantes que, no hace mucho, ofreció funciones en las colonias de Iztacalco o lugares como el Multiforo 246. Una banda, que, como dice “Many”, también tiene canciones qué dedicar a sus haters: “Como toda banda, ya sabes, tienes que lidiar con ellos. Nos alimentan”.

Finalmente, a pesar de todo, Rafsil no pierde la esperanza de volver a pisar los escenarios. “Cuando nos lo permita el semáforo, pues ya empezaremos a tocar. Si se extraña, pero hay que aguantarse un ratito”, comenta Carlos Portillo, guitarrista de la banda a través de una video llamada.