Desde el imponente desierto sonorense, hasta las montañas sumergidas en la neblina del sureste, surgen miles de voces… ¿las escuchas? Son las voces de los pueblos originarios.

Los pueblos originarios han buscado defender su identidad y su autonomía a través de la base de sus respectivas culturas: la lengua. Compartimos vida y territorio con comunidades y pueblos que muchas veces no sabemos que existen y que luchan por ser vistos y escuchados.

Estas comunidades no están estancadas en el pasado: han tomado herramientas y medios que generalmente sólo le atribuimos a la comunidad mestiza. Los géneros de música contemporáneos son uno de ellos.

Mi primer acercamiento a la música en lenguas originarias fue con Tribu, un grupo que ofrecía presentaciones al interior del Museo Nacional de Antropología. Su propuesta reinventa los sonidos del México antiguo con instrumentos contemporáneos, con letras en idiomas como el náhuatl, el maya y el wixárika. Este acercamiento fue a mediados de la década de los 90s y son mi referente como pioneros del movimiento.

Aunque el grupo dejó de presentarse en el Museo desde hace tiempo, sigue activo y tejiendo redes con otros artistas. En julio de 2014, el grupo participó en el Festival de la Toltequidad en Mineral de Pozos, Guanajuato; donde compartieron escenario con Hamac Caziim, veteranos del rock pesado en cmiique iitom, la lengua materna de la comunidad comca’ac de Sonora.

Conocí a Hamac Caziim en octubre del 2013 en la II Cumbre de Comunicación Indígena celebrada en Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca. También participaron el grupo de rock tsotsil Vayijel, el colectivo de jazz mixteco Nunduva Yaa, Chan Santa Roots con propuesta de reggae en maya y Venado Azul (hoy Wirikuta Azul); grupo wirrárika de cumbia-fusión. En este evento conocí a un compañero que más tarde me presentaría a Lumaltok, agrupación de rock tsotsil que participaría en el Vive Latino de 2014.

Varias bandas que hacen música en su lengua se han abierto camino y han llegado a escenarios del nivel del Vive Latino o Cumbre Tajín; sin embargo la ruta no ha sido nada fácil, particularmente para los grupos jóvenes y emergentes. Tengo muchas amistades que se dedican a la música, toda la gente en ese círculo coincide en algo: es difícil empezar y es difícil mantenerse.

Si en la ciudad es difícil adaptarse a la carrera de perros en la que se ha convertido el mercado musical; esto suele complicarse para las juventudes de los pueblos originarios que deciden dedicarse a la música y expresar su cultura e identidad de maneras distintas

En el caso tanto de Lumaltok como de Vayijel, la fricción comenzó dentro de sus respectivas comunidades: Zinacantán y San Juan Chamula. Sectores más conservadores de la comunidad tsotsil no aprobaban el que sus jóvenes estuvieran haciendo rock. A los integrantes de ambas bandas alguna vez se les tachó de locos, que lo que estaban haciendo era “diabólico”.

Integrantes de Lumaltok han señalado que en sus inicios, la banda ensayaba prácticamente a escondidas para evadir el escarnio y la crítica de algunos vecinos. Con el tiempo, estas bandas tsotsiles han ido rompiendo las barreras generacionales de sus propios pueblos.

Parafraseando las palabras de integrantes de Lumaltok: “nuestra generación es distinta a la de nuestros padres, y ésta a su vez diferente a la de nuestros abuelos. Con cada nueva generación, encontramos nuevos medios para crear, manifestarnos y expresarnos. Quizás esto no les guste tanto a algunas personas que  estuvieron antes de nosotros, pero eso no quiere decir que perdamos o contaminemos nuestra esencia original. Sí, hay cierto tinte de emancipación y rebeldía en esto, pero tampoco significa una falta de respeto. Es una forma de decir: es mi turno de hacer lo que debo, pero a mi manera.”

Después de todo, el rock n’roll siempre ha sido revolucionario, contestatario: en sus inicios escandalizó a las buenas conciencias; pero al final, el poder de la música rompe barreras lingüísticas y culturales. La música seduce y atrapa, congrega a personas de variopintos bagajes culturales en un solo espacio para ponerse en una misma frecuencia y disfrutar. Es aquí donde nos encontramos con una barrera que, como público, nos corresponde romper y que para los músicos representa otra frontera por conquistar.

El gran obstáculo para la música contemporánea de los pueblos originarios es nuestro desconocimiento de la existencia misma de las comunidades en las cuales se están gestando movimientos que están poniendo en alto sus nombres y aportando a la valiosa labor de darle continuidad al uso de las lenguas maternas a través de la música.

Es parte de un relevo generacional que nos corresponde también a nosotros. Así como los pueblos originarios han estado cambiando y evolucionando a través del tiempo; como consumidores culturales debemos reconocer la diversidad cultural que nos rodea. Y abrir nuestros oídos y corazones a las voces que vienen junto con esta onda expansiva que se abre paso con cada vez más fuerza.

No todo es Café Tacvba o Zoé; vale la pena echarle un ojo y un oído a proyectos menos conocidos que germinan en los rincones profundos de este territorio que llamamos México.

Lista de reproducción de música contemporánea en lenguas originarias, curada por Colectivo Siete Jaguar

Nota de la autora: Es imposible abarcar la totalidad de este fenómeno y lo que ha sucedido en los últimos años con la música contemporánea en lenguas indígenas en un sólo texto. Una actualización importante es la participación de La Sexta Vocal (ska en zoque) en la Carpa Intolerante en el Vive Latino 2019, y tanto su nominación como la de Colectivo Membda (fusión electrónica en hñahñu) a los Indigenous Music Awards de 2019.

También ha habido un fuerte movimiento de rap en lenguas originarias, con notable presencia en la Ciudad de México; el cual merecería un artículo propio.

Artículo y foto por Susana H. Frías

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10 comentarios

  1. Pv

    Falta Zara monrroy una exelente cantante y activista en su lengua !

    • Este artículo lo escribí originalmente en 2014 cuando aún no conocía el proyecto de Zara, es más una crónica de lo que yo estaba viviendo y las bandas que estaba conociendo en ese entonces.

      La idea es darle seguimiento al texto, explorando más propuestas y proyectos en esta plataforma durante las próximas semanas. Saludos y gracias por leer.

    • Patricia

      Hoy los descubro, el poder de las redes y el rock! A compartir!!!! ✌️✌️✌️

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